La Iglesia en busca de la unción
La alabanza no debe ser dada para recibir algo a cambio, sino que con corazón dispuesto hemos de darla en sacrificio al Señor, en acción de gracias.
Entonces viene la pregunta: ¿en qué manera hemos de esperar los creyentes la unción del Espíritu Santo?
• Salmos 133 1. ¡Mirad cuán bueno y cuán delicioso es Habitar los hermanos juntos en armonía! 2. Es como el buen óleo sobre la cabeza, El cual desciende sobre la barba, La barba de Aarón, Y baja hasta el borde de sus vestiduras; 3. Como el rocío de Hermón, Que desciende sobre los montes de Sion; Porque allí envía Jehová bendición, Y vida eterna.
El salmo nos muestra claramente que la congregación ha de estar unida y en armonía , y compara este hecho con la unción que recibio Aarón, en todo su cuerpo, partiendo desde la cabeza. También lo compara como el rocío de Hermón, derramado sobre los montes, cuando el rocío desciende todo queda impregnado de él. Así pues esperemos en unión y armonía la bendición de Jehová y la vida eterna.Dejemos de ser hermanos solamente de nombre, y pasemos a ser verdaderos hermanos, preocupandonos unos por otros, en un mismo espíritu y sentir.
Veamos ahora la forma en que la iglesia primitiva recibió la promesa del Espíritu Santo:
• Hechos 2 1. Cuando llegó el día de Pentecostés, estaban todos unánimes juntos. 2. Y de repente vino del cielo un estruendo como de un viento recio que soplaba, el cual llenó toda la casa donde estaban sentados; 3. y se les aparecieron lenguas repartidas, como de fuego, asentándose sobre cada uno de ellos. 4. Y fueron todos llenos del Espíritu Santo, y comenzaron a hablar en otras lenguas, según el Espíritu les daba que hablasen
Comprobamos aquí cómo los del aposento alto esperaron y recibieron esa promesa, no nos dice solamente que estaban juntos, sino que estaban unánimes , en un mismo parecer, con una misma meta, unidos.¿¿Cuántas veces pasa que sentados en la congregación no sabemos casi nada de la persona que se sienta a nuestro lado? ?¿Realmente tenemos unión con ella? Todos somos diferentes , y no es posible que todas las demás personas nos gusten, unas nos caeran peor, otras mejor, bueno, también sucede entre hermanos de sangre, que se tenga más predilección por uno que por otro, pero eso no quita que dejen de ser hermanos, y como nuestra propia sangre hemos de tratarlos, pues nos une Sangre mas importante que la biólogica, la Sangre de Cristo.
• Efesios 4:1 Yo pues, preso en el Señor, os ruego que andéis como es digno de la vocación con que fuisteis llamados, 4:2 con toda humildad y mansedumbre, soportándoos con paciencia los unos a los otros en amor, 4:3 solícitos en guardar la unidad del Espíritu en el vínculo de la paz; 4:4 un cuerpo, y un Espíritu, como fuisteis también llamados en una misma esperanza de vuestra vocación; 4:5 un Señor, una fe, un bautismo,
• Colosenses 3 :12 Vestíos, pues, como escogidos de Dios, santos y amados, de entrañable misericordia, de benignidad, de humildad, de mansedumbre, de paciencia; 3:13 soportándoos unos a otros, y perdonándoos unos a otros si alguno tuviere queja contra otro. De la manera que Cristo os perdonó, así también hacedlo vosotros. 3:14 Y sobre todas estas cosas vestíos de amor, que es el vínculo perfecto.
• Juan 13:34 Un mandamiento nuevo os doy: Que os améis unos a otros; como yo os he amado, que también os améis unos a otros. 13:35 En esto conocerán todos que sois mis discípulos, si tuviereis amor los unos con los otros.
• 1 Corintios 13:4 El amor es sufrido, es benigno; el amor no tiene envidia, el amor no es jactancioso, no se envanece; 13:5 no hace nada indebido, no busca lo suyo, no se irrita, no guarda rencor; 13:6 no se goza de la injusticia, mas se goza de la verdad. 13:7 Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo espera, todo lo soporta.
Romanos 13:10: El amor no hace mal al prójimo; así que el cumplimiento de la ley es el amor.
Trabajemos así pues para que este amor fluya entre nosotros, para que crezca en las congregaciones, manteniendonos en pie sustentados por la Palabra, es importante que no descuidemos este aspecto, sino que nos esforcemos no solo para juntarnos, sino para unirnos, pegados con el pegamento perfecto: el amor. Busquemos a Dios de la forma correcta, y no a la manera que nos quieren vender , y digo vender porque se está comerciando con la alabanza publicitandola cómo contenedora de mucha unción, sobra recordar que Dios ni se compra ni se vende.Por supuesto el amor entre los hermanos ha de ser desinteresado, no esperando recibir nada a cambio, sino por obediencia a las enseñanzas de Cristo, porque es haciendo la voluntad del Padre que podemos ser llamados hijos y es obedeciendo como alcanzamos las promesas.
Que el Señor en su misericordia nos saque del error y ponga luz en nuestros ojos abriendo nuestro entendimiento. Dios los bendiga.